Cada maestrillo tiene su librillo, toda la vida he escuchado esto. Este año hay un entrenador que le ha hecho creer a Berdigch en el mismo. Sabe de sus virtudes y Rubí sabe explotarlas, sobre todo en los partidos de fuera de casa donde, el equipo local deja más espacios.
Lo que más me alegra al respecto, es su vocación rematadora, los dos goles que ha metido son de delantero centro, lo cual es muy esperanzador, dado que a Oscar Diaz le esta costando, aunque no dudo que acabará metiendo goles.
Lógicamente en los encuentros de casa, es más fácil que aporte velocidad que goles, porque el equipo contrario siempre se va a cerrar más.
Me alegro por él.