Me di cuenta el otro día. Me han absuelto y no sé quién, ni cómo, ni por qué. Pudo ser Dios, el Karma, la divina providencia, los santos, Alá, Buda, los profetas, la virgen María, el equilibrio cósmico o el poder psicotrónico. Sucedió así:
Puse el pie fuera del coche y allí estaba la reluciente moneda. Cincuenta céntimos. Entonces la idea de la absolución acudió a mi cabeza. En aquel momento parecía que no tenía ningún sentido. Eso sucedió el domingo, pero este martes volvió a ocurrir. Me tocaron veinte euros más en el sorteo de la ONCE. ¿Por qué a mí? Nunca juego. Compré el cupón en un estado mental entre inconsciente y absurdo, cediendo sin saberlo al deseo de que mi absolución fuera real. Quizá el cosmos haya decidido que me está castigando demasiado, aunque me niego a creer que yo esté peor que cualquier otro. Mi abono costó 385 euros, sin embargo ya ha transcurrido media temporada. Para la mitad que queda son 192,50 €. Diez partidos en Zorrilla. A razón de 19,25 € cada uno. En la lotería de Navidad me cayeron 120€ y en la del niño 40€ más. En total he recuperado 180,50 €. Sólo me faltan doce euros y estoy completamente seguro: de alguna forma me van a llegar. Aun si no lo hicieran, podemos contar con algún partido que caiga en lunes y al que no podría ir de todas formas. Alguien me ha devuelto el dinero de medio abono. Alguien cree que merezco olvidar la última razón para subir a Zorrilla. Olvidar que he pagado por ello. Alguien ha decidido que la próxima vez que abra la cartera veré dinero para emplear en ocio en condiciones.
Son ya dos descensos y mucho aburrimiento. Mucho "esto ya lo he vivido" y se hace cuesta arriba. Quedan diez partidos en Zorrilla y alguien me ha devuelto todo ese tiempo que decidí hipotecar ya en septiembre. La desafección con el equipo avanza constante e implacable. Los aficionados sufrimos horarios variables e irracionales, las empresas de la ciudad se quedarán sin cobrar los trabajos que hicieron al club. El juego del equipo quizá vuelva a ser atractivo... o quizá no, pero desde luego el Real Valladolid hace mucho que se ha olvidado de mí y creo que también se ha olvidado de toda la ciudad. Quizá sea por eso que alguien me ha absuelto y ahora soy libre de decidir si voy o no.
CIENCIEROMiér 22 Ene 2014, 18:27