Real Valladolid Juvenil A - Temporada 2013/14 - División de Honor Grupo V

Bien es sabido que muchas veces en esto del fútbol no gana el mejor, ni el más habilidoso ni el que más técnica tiene. Y es que de cada diez partidos entre el Puente Castro y el Valladolid juvenil, nueve serían para los de Chuchi Macón. Sin embargo, ayer el lamentable estado del terreno de juego por las lluvias caídas en León condicionaron todo lo demás. Y todo lo demás fueron 90 minutos donde el Puente Castro se sintió como pez en el agua, mientras que el Valladolid nunca supo cómo ni dónde se jugaba el partido. Ningún jugador de los visitantes estuvo intenso ni acertado. Nada que ver con un Puente Castro que sabía lo mucho que se jugaba, y desde el pitido inicial apretó los dientes y puso casta, orden y esfuerzo para llevarse los tres puntos. El conjunto leonés comenzó a gotear ocasiones desde los primeros minutos con un entramado defensivo que no daba ningún respiro a los rivales. En ataque, el cuadro arlequinado no se complicaba lo más mínimo, jugando como si de un equipo veterano se tratase. Balones largos a los costados esperando el error de alguno de los centrales que, eso sí, no llegó en ningún momento. Especialmente incisivo se mostró Mario, atento y rápido al corte a pesar de llevarse la amarilla que le condicionó durante los 60 minutos de juego. Sin embargo, el defensor vallisoletano supo medirse para no dejar a los suyos con diez. En la primera parte los dos equipos se tentaron demasiado. El Puente Castro, en un constante querer y no poder por falta de calidad arriba. Mientras que los de Chuchi Macón parecían poder más de lo que querían. No hizo Casado el mejor partido en lo que va de temporada. El delantero vallisoletano no fue capaz de generar espacios ni de ganar la partida a Alexis y Pablo Fernández.

Nada que ver con el segundo tiempo, donde el Puente Castro encontró pronto premio a su trabajo. Un gol de César tras una excelente jugada de Eriz por la banda para regalar el primer gol del partido. Un jugador muy a tener en cuenta por lo visto ayer. A partir de ahí, con el gol local todo fue mucho más fácil para el Puente Castro, que decidió retrasar líneas y complicarse menos aún de lo que estaban haciendo. Por su parte, el Real Valladolid seguía sin saber por dónde le venía el partido. Resulta complicado encontrar un partido en el que los de Chuchi Macón hicieran menos mérito que ayer. Ni siquiera una ocasión que llevarse a la boca. Como mucho, los caracoleos de Toni para tratar de desequilibrar la balanza, siempre con acciones individuales que no encontraban fruto. Con el partido prácticamente resuelto, el Puente Castro decidió adornarse para resolver. Lo hizo sacando la pelota jugada desde atrás, con combinación de casi todos los jugadores, para acabar con el lateral derecho David entrando por la autopista y reventando el balón en las redes de Dani. Mucho que mejorar para el Valladolid, sobre todo en cuanto a actitud. Y es que de aquí a final de temporada habrá muchos equipos como el Puente Castro que se jueguen la vida, mientras que el Valladolid se ha dejado llevar en las dos últimas jornadas ante equipos de abajo.