Cómo desafiar a Ahmadineyad en su propia casa

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Ana Pastor, presentadora de los Desayunos de TVE, ha tenido ocasión de entrevistar al presidente iraní Mahmud Ahmadineyad en Teherán. Una entrevista tensa y beligerante, en la que Pastor no ha esquivado temas controvertidos como la ambigua posición iraní frente a las revoluciones árabes o la represión a los opositores políticos del país.

Una tensión que ha tenido su punto culminante cuando la periodista ha espetado al mandatario “No sé aquí, pero en España los periodistas preguntan y los entrevistados contestan”, ante lo cual Ahmadineyad le ha reprochado que intentara conducir sus respuestas: “Déjeme hablar y que los telespectadores saquen sus propias conclusiones”.

Ha sido difícil, sin embargo, sacar al presidente iraní del guión, que ha repetido machaconamente que la responsabilidad de la situación en Libia es de Occidente, por el apoyo económico prestado a los dictadores de la zona. Ha rechazado de plano una intervención de la OTAN, vaticinando un nuevo Irak.

La anécdota de la entrevista radica sin embargo en el velo que Pastor debía lucir. Por norma, las mujeres en Irán deben cubrirse el pelo, sea cual sea su nacionalidad y confesión. Y es una medida que Ahmadineyad se toma a pecho: hace unos años también Pepa Bueno, directora de los Informativos de TVE, tuvo que entrevistarle llevando velo.



Pero a medida que la conversación iba acalorándose, el velo se fue deslizando de su cabeza hasta dejar su melena completamente visible. El momento en el que esto ocurre es particularmente chocante, ya que Ahmadineyad respondía a las acusaciones de represión atacando a España con unas vagas alusiones al terrorismo de ETA: “¿Acaso no encarcelan ustedes a los separatistas?”

Pastor no hizo ningún intento de recolocarse el velo durante el resto de la duración de la entrevista. Es difícil de creer que fuera un accidente: correctamente colocado, el tocado de las mujeres musulmanas les permite hacer su vida cotidiana sin caerse.

En cuanto a Ahmadineyad, dio muestras evidentes de haberlo entendido como un desafío intencional. Se le pudo ver reírse, señalarse el pelo y hacer comentarios en off a su equipo. Pero no hizo ninguna alusión directa y terminó la entrevista con un mensaje conciliador hacia España y deseándole la libertad a todos los pueblos de Oriente Medio. Pero ni siquiera entonces Ana Pastor soltó la presa: “Eso mismo deseamos todos, presidente”.

La entrevista entera, aqui: http://www.rtve.es/alacarta/videos/los-desayunos-de-tve/ahmadineyad-intervencion-militar-libia-solo-empeorara-cosas/1045485/

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