Edgar Sosa a prueba

Edgar Sosa (15 de enero de 1988) es un base-escolta de 1,90 metros de altura formado en la Universidad de Louisville donde en su año sénior promedió 13,1 puntos, 2,1 rebotes y 4,5 asistencias. Según ha sabido Solobasket el dominicano llegará a España para reforzar a un Blancos de Rueda Valladolid que ha perdido a Uros Tripkovic, Fenerbahce, y David Navarro, lesión, si supera la pertinente prueba.

Tras pasar por la Summer League de Las Vegas con Detroit Pistons, vivió su primera experiencia profesional la temporada 2010-11 en Angelico Biella de la LEGA siendo el tercer máximo pasador de la categoría con 4,5 asistencias a los que añadió 14,1 puntos, 2,3 recuperaciones y 1,4 recuperaciones.

Este combo estremeció al mundo por su lesión en el Preolímpico de Mar de Plata fracturándose tibia y peroné al caer mal en los instantes finales de un partido que vencían con comodidad a Panamá.

Además, Sosa no será el último en llegar ya que el Club peina el mercado en busca de un interior.


http://www.solobasket.com/contenidos/edgar/sosa/llega/prueba/valladolid/este/lunes/c-31438.html

Veremos que tal, este caso con de lesion con Uros nos salio muy bien, tiene buenos numeros antes de lesionarse, aqui con que de un buen relevo al Renfroe nos vale.

La verdad sobre la marcha de Edgar Sosa

Muchas especulaciones han girado en torno a la marcha de Edgar Sosa. Problemas económicos, malas condiciones en su vivienda, poco compromiso, etc. Nada de eso es cierto. Tanto el club como el representante del jugador confirman que Edgar Sosa abandona Valladolid por dos razones muy claras. La primera obedece a aspectos puramente físicos. El esguince de tobillo que sufre el dominicano en la última jugada de un entrenamiento se ha alargado en su recuperación y Sosa no se encuentra totalmente recuperado, a pesar que desde el club se ha dicho que las pruebas realizadas no revelan ninguna rotura o inflamación de la zona.

Sin estar recuperado totalmente, Sosa no tenía la confianza para volver a jugar. Pero hay otra razón que explica su marcha ya que, tras convencer al cuerpo técnico en su primer mes de contrato (superando la semana de prueba inicial), el jugador esperaba una renovación para lo que restaba de temporada. Por su parte, el club tenía ciertas reticencias debido a la lesión de larga duración que había sufrido Sosa, algo que no estaba relacionado con el esguince de tobillo posterior.

Por tanto, falta de recuperación y disconformidad con la duración del contrato. Ni mas ni menos. De hecho, el representante del jugador ha dejado claro que no había ningún problema económico, estaban al día y el trato con el club ha sido exquisito. Además, la polémica con la famosa calefacción y el agua caliente de la casa donde residía Sosa hace unas semanas se ha magnificado en grado sumo. El calentador de agua funcionaba correctamente, incluso el propio Eduardo Pascual acudió a comprobarlo, pero el jugador era el que no entendía cómo hacerlo, lo que supuso este malentendido.

Desde el club se ha apuntado que podría haber alguna oferta de por medio, aunque la idea del jugador no pasa por ahí. Su intención es recuperarse totalmente de esta nueva lesión y, a partir de ese momento, buscar un equipo donde acabar la temporada. Porque esto es precisamente lo que quería Sosa: acabar el año en Valladolid. De hecho, consideraba que había demostrado su calidad y su plena recuperación de la lesión sufrida hace casi dos años.

El representante del dominicano ha confirmado que el trato con el club, Eduardo Pascual y el cuerpo técnico ha sido perfecto, que entienden la postura del club y que esperan volver a cruzar sus caminos. De hecho, el agente ha expresado que “si Sosa no se lesiona el tobillo, estoy convencido que acaba la temporada en Valladolid”.

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