Mucho orgullo uruguayo pero nos ha salvado la temporada uno de Murcia
Y también Iván Sánchez, que en la Segunda parte fue el único que la pedía para desbordar y lo intentaba una y otra vez. Su mejor partido del año en el momento justo, pero no ha tenido una buena temporada. Como supongo que no renovará, agradecimiento por darlo todo hasta el final y por la personalidad demostrada, y mucha suerte, porque para Segunda y en el equipo apropiado, creo que tiene recorrido unos años.
Es que es eso..Un suicida y un mediocre...No se puede hacer siempre las cosas del revés
Bufff, me ha generado mucha desafección Pezzolano y discrepo de muchos planteamientos, alineaciones y cambios, y especialmente la gestión de los partidos cuando nos poníamos por delante.
Pero no soy capaz de explicar el ascenso, porque el juego y los números de la segunda vuelta parecen imposibles de relacionar. Supongo que algo de mérito tendrá, y le reconozco una cosa positiva, como el fin de los clanes y un ambiente general de plantilla muy sano entre ellos, pero creo que no hacía falta llegar al punto de crispación y provocación permanente a un sector de la afición que ha sido muy crítico, pero que lo ha expresado de forma razonable.
Le valoro el ser fiel a su jefe Ronaldo y autoinmolarse para defenderlo, pero las formas le han condenado y no hay forma de mantener esta tensión otra temporada. Eso sí, se llevará el finiquito completo y que tenga suerte dónde vaya.
Yo sí...Se ha jugado todo a una carta,marcar desaparecer del partido y que el tiempo pase a base de una férrea defensa,que para un equipo de tanto dinero es tremendo.
3-2: ¡De vuelta a Primera! En un partido imposible de explicar, con remontada en el tiempo de descuento, el Real Valladolid asciende en Zorrilla en la penúltima jornada de competición
¡El Real Valladolid es de Primera División! Tras un partido imposible de explicar en el que se dieron todos los ingredientes que condensan lo que el fútbol significa, el Pucela logró remontar en el tiempo añadido del segundo acto un partido que se había puesto cuesta arriba para, unido al resultado en El Molinón, volver a la máxima categoría del fútbol español por la vía rápida y a falta de una jornada para que acabe LaLiga Hypermotion.
La primera parte fue propia de un partido de final de temporada. Con tanto en juego, por ambos lados ya que el Villarreal B buscaba evitar el descenso, los equipos no mostraron su fluidez habitual y las ocasiones apenas llegaron. A partir del minuto 30 el Pucela quiso algo más, tuvo un gol anulado por fuera de juego en un cabezazo de Sylla, dominó y acarició el gol en un centro lateral al que Monchu estuvo a punto de llegar de cabeza, ya en el 44'.
La locura se reservaba para la segunda mitad.
Porque esos 45 minutos, especialmente los seis de prolongación, fueron un frenesí de emociones. Un carrusel de emociones en el que la afición blanquivioleta pasó por un montón de fases. Del éxtasis del gol de Moro en el 61', un disparo raso ajustado al palo para abrir la cuenta. Del jarro de agua fría del empate, en el 76'. De la alegría de nuevo, en el 84', con las noticias que llegaban desde Gijón, el 1-0 ante el Eibar. Un gol dejaba al Pucela en Primera.
El gol llegó, pero en la otra portería. La rabia, el enojo, al ver que lo que estaba tan cerca se escapaba, cuando en el 86' Tasende anotó el 1-2 que heló la sangre en Zorrilla. El ascenso se alejaba.
Pero, cómo es el fútbol. Biuk la tuvo en el 89' para enganchar de nuevo al equipo. Se quería. Y se pudo en un final casi milagroso, para hacer creer. Meseguer de cabeza mandó a la red el centro de Iván Sánchez cuando se cumplía el tiempo reglamentario, y devolvió la luz a un templo blanquivioleta que quiso más. El propio Iván Sánchez impactó su disparo contra la madera en el inicio de los seis de añadido, Meseguer la tuvo de nuevo de cabeza, y la sorpresa llegó cuando el árbitro, avisado desde el VAR, acudió a revisar una mano en el área. Suspense. Tensión. Mano. Penalti. Gol. Sylla asumió la responsabilidad y no falló para culminar una remontada épica que, en ese momento, ponía al Real Valladolid en Primera.
Pero ay de quien se pensara que estaba todo hecho. Ser del Pucela implica saber sufrir. Y quedaba un disparo desde la frontal del Villarreal B que impactó en el palo. El silencio, en esas décimas de segundo, fue el dueño de un Zorrilla donde casi 25.000 almas soñaban. Final en Gijón, 1-0, el Eibar caí derrotado. Final en Valladolid, 3-2, el Pucela es de Primera División.
Ficha técnica (3) Real Valladolid: Masip; Luis Pérez, Tárrega (Boyomo, min. 46), Javi Sánchez (Jurić, min. 77), Escudero (Lucas Rosa, min. 72); Meseguer, Lucas Oliveira, Monchu; Moro (Biuk, min. 72), Sylla, Anuar (Iván Sánchez, min. 57) (2) Villarreal CF B: Iker Álvarez; Alti, Lekovic, Pau, Tasende (Espigares, min. 88); Collado (Ferrari, min. 67), Rodrigo, Requena (Gelardo, min. 67), Romero (Víctor, min. 67); Ontiveros, Pascual Goles: 1-0, Moro, min.61. 1-1, Lokovic, min. 76. 1-2, Tasende, min. 86. 2-2, Meseguer, min. 90+. 3-2, Sylla (p), min. 90+ Árbitro: Sesma Espinosa (C.T. riojano) amonestó con cartulina amarilla a los visitantes Ontiveros, Requena, Lekovic; y al local Iván Sánchez, Boyomo, Biuk Incidencias: partido correspondiente a la jornada 41 en LaLiga Hypermotion disputado en el Estadio José Zorrilla el domingo 26 de mayo de 2024 ante 24.765 espectadores
Décimo ascenso a Primera del Pucela El Real Valladolid de Pezzolano escribe su capítulo en la historia de los asaltos a la máxima categoría
El Real Valladolid firmó este domingo su décimo ascenso a Primera División desde su fundación en 1928. Un día especial en el que el Pucela venció al Villarreal CF B y pudo certificar su objetivo en la penúltima jornada de LaLiga Hypermotion debido a la derrota de la SD Eibar.
Estos son los diez ascensos a Primera, desde el Pucela de Barrios al Real Valladolid de Pezzolano:
1. El primer salto a Primera costó 20 años y fue un ascenso no solo para la historia del Real Valladolid, sino para la historia del fútbol español. El Real Valladolid de Barrios en el banquillo y Juan Represa en la presidencia consiguió dos saltos consecutivos, desde la Tercera División hasta la Primera. Fue tras la temporada 1947/48 y con el concurso de jugadores míticos como Torquemada, Busquet, Vaquero, Ortega, Lasala o Coque.
2. Tras el primer ascenso, el Real Valladolid completó 10 temporadas consecutivas entre los grandes. Pero en la 1957/58 cayó a la división de plata. Por suerte, su paso por la categoría inferiores fue efímera y en la 1958/59 retornó a la élite. Carlos del Río Hortega era el presidente, el mítico José Luis Saso estuvo a los mandos del banquillo y el gran Morollón como artillero.
3. Tras dos temporadas en Primera, el Real Valladolid volvió a Segunda y, de nuevo, rebotó rápidamente a la élite en la 1961/62. Además, estrenó vía para conseguirlo, ya que selló el ascenso en una inolvidable promoción ante el “primera” RCD Español. 0-0 en Sarriá y 2-0 en el viejo Zorrilla, con un entrenador que fue fichado por José Miguel Arrarte solo para esta doble confrontación: Heriberto Herrera. Como jugadores, consiguieron su segundo ascenso Matito, Calvo, Ramírez, García Elorduy, Mirlo y Morollón, otra vez pichichi del Pucela.
4. Uno de los ascensos más celebrados en Valladolid fue el cuarto. ¿El motivo? Porque el de la campaña 1979/80 puso fin a una larga travesía por Segunda de 16 temporadas consecutivas. La acertada presidencia de Gonzalo Alonso, una dirección deportiva brillante de la mano de Ramón Martínez, un entrenador contrastado como Eusebio Ríos y una plantilla compensada, mezcla de juventud y experiencia, de cantera y fichajes de buen rendimiento, sellaron un gran ascenso para dar paso a la edad de oro del fútbol vallisoletano.
5. En la edad de oro blanquivioleta hubo un tropezón: en la campaña de “los colombianos” el equipo perdió la categoría. Pero, otra vez, el paso por Segunda fue fugaz y en la temporada 1992/93 el Real Valladolid conseguía el ascenso directo en un emocionantísimo partido en Palamós, con Mesones como técnico tras la destitución de Boronat y Saso, y figuras en su plantilla como Caminero, Amavisca, Onésimo y Alberto, máximo artillero de aquel equipo.
6. El sexto ascenso fue inolvidable. ¿Cómo olvidar aquella temporada 2006/07 en la que el Real Valladolid de Mendilibar pasó como un tanque en una carrera de bicicletas? A falta de ocho jornadas del final y tras 29 partidos consecutivos imbatido, el Pucela puso el lazo al ascenso en Tenerife y rumbo a Primera en ‘La Leyenda del Pisuerga’.
7. El séptimo ascenso, el de la 2011/12, también llevó el nombre del entrenador: Djukic. Su ‘Somos Valladolid’ fue bandera de una temporada preciosa, con un mano a mano épico contra el Deportivo y el Celta. Finalmente, los gallegos subieron directamente y el Pucela tuvo que hacerlo en la promoción en la que apeó al Córdoba y al Alcorcón.
8. Una vez más, el ascenso tuvo nombre y apellido: Sergio González. El entrenador catalán aterrizó en Zorrilla en situación desesperada para ascender, pero obró el milagro. Arrasó en el tramo final de la competición 2017/18 y arrasó, sobre todo, en el playoff, pasando por encima del Sporting de Gijón y del Numancia. De aquel equipo, liderado en el campo por Jaime Mata, solo quedan dos supervivientes: Masip y Anuar.
9. El ya penúltimo ascenso -el noveno- es tan reciente que está en la memoria de todos y cada uno de los abonados: fue hace dos cursos (2021/22). En una última jornada histórica por la derrota del Eibar (principal favorito para el ascenso) en el campo de un descendido Alcorcón, el Pucela de Pacheta retornó a la categoría que había perdido el año antes.
10. La gloria de la 2023/24. Y otra vez ante el décimo mandamiento: ‘No bajarás’. Y es que el Pucela de Pezzolano apretó el acelerador en el tramo final del curso para encadenar diez jornadas sin perder que, con el triunfo frente al Villarreal B, le devolvieron a Primera tras, de nuevo, otra derrota crucial de la SD Eibar.
Orgulloso Pezzolano se mostró feliz por los jugadores, su equipo de trabajo, su familia y por devolver al Real Valladolid a Primera
El Real Valladolid es otra vez equipo de Primera, y lo consiguió de manera agónica, sufriendo y peleando hasta el último minuto para sellar el ascenso en la penúltima jornada. Por ello, Paulo Pezzolano se mostró, sobre todo, orgulloso: “Orgulloso por mi equipo de trabajo y por los jugadores y por dejar a esta ciudad en Primera. Muy feliz por mi familia, por mis padres, por mi señora”.
Así, el técnico blanquivioleta también ensalzó ser uruguayo para tener esa “rebeldía” en situaciones complicadas y en un año que “no fue bueno”. “En los momentos más difíciles, doblegamos”, dijo. En ese sentido, resaltó el “blindaje para lograr el ascenso una fecha antes con un equipo humilde en una temporada con muchas lesiones”.
Y es que el Pucela tuvo que luchar hasta el final en un partido que se vivió con “mucho nerviosismo, como pasó en otros campos”. “Es el año más difícil, la mayoría de los equipos se quedan a dormir tres años o más. Conseguimos algo que sabíamos que iba a ser muy duro”, comentó, además de “agradecer” a diferentes personalidades del Club.
Valladolid volcada con los suyos La celebración por la ciudad reunió a miles de personas que compartieron junto al equipo la alegría por el ascenso a Primera División
Valladolid ha arropado a los suyos en un lunes difícil de olvidar. Con la ciudad teñida de blanco y violeta, miles y miles de personas han compartido su cariño, llenado puentes, abarrotado calles y celebrado junto a la primera plantilla del Real Valladolid para poner el broche a un ascenso épico, a la vuelta del Pucela a donde merece estar, entre los mejores del país.
Como es habitual las aguas del Pisuerga fueron el primer escenario de unos actos multitudinarios en una tarde de mayo soledada y calurosa en la ciudad. La Leyenda del Pisuerga remontó las aguas desde el AC Santa Ana hasta el embarcadero de la playa de las Moreras, una navegación en la que acompañaron numerosas embarcaciones y que tuvo sus momentos más álgidos en cada paso bajo los nueve puentes donde se congregó la afición, también presente en las orillas durante prácticamente todo el recorrido.
Una vez en tierra firme la expedición sintió la pasión de cerca. Cánticos, aliento y devoción de una ciudad que ha sabido sufrir y que ahora disfruta del regreso a Primera División por la vía rápida, con un ascenso directo a falta de una jornada para que acabe la fase regular. Subidos en un autobús descapotable con los colores del Pucela, un amplio recorrido por las calles del centro de la ciudad desembocó en el corazón, en la Plaza Mayor. Las riadas de aficionados confluyeron allí, donde tuvo lugar la recepción oficial por parte de las instituciones. Con las emotivas palabras de los futbolistas desde el balcón en una plaza llena de vallisoletanos se puso el final a un día que toda la ciudad, toda la provincia, merecía vivir.
